Un regalo para mi familia

Dentro de muy pocos días mi familia recibirá un inmenso regalo, llegará envuelto en suave piel y con la música de un llanto infantil. Dentro de muy pocos días acunaré a mis brazos a un pequeño…mi pequeño Samuel Alejandro.

Pienso entonces en los miles de niños que vienen al mundo para sufrir, en los que no llegan a ver la luz por la irresponsabilidad de los adolescentes, en los que no tienen a nadie para llevarlos de la mano…me convenzo cada vez más de que engendrar a un bebé y dar a luz es un acto bendito, de extrema responsabilidad, de amor infinito.

Cuando mi nene llegue va a estar rodeado de ternura, de toda la devoción de mami y papi y de la atención de los abuelos, tíos y primos que sueñan con él, cuando Samuel Alejandro llegue el mundo va a seguir lleno de guerras, hambre y sufrimiento, pero mi mundo, el de mi pequeña familia, se va a iluminar con el sol de su sonrisa…