¿Cómo es la familia cubana?
La familia cubana no se parece a ninguna, necesita ser única como sus miembros, original y surrealista a veces. No tiene que ser una familia funcional, la disfuncionalidad también abunda en la isla y no por eso marcha tan mal.
En nuestra sociedad los cimientos descansan sobre los hombros de la familia, es el nido de descanso o tribulaciones, según las relaciones interpersonales que primen. La familia siempre te acompaña, se preocupa, pelea por ti con uñas y dientes y celebra las victorias con insuperables fiestas familiares.
Las condiciones económicas y el escaso fondo habitacional se unen a la concentración de la población en las ciudades y es común encontrar hogares compuestos por mamá, papá y nene, donde también viven abuela, abuelo, tío, tía, primo y hasta un viejito que ya nadie recuerda cuál es el grado de consanguinidad exacto pero que todos saben que es la familia.
Muchas veces se extiende al barrio, a la casa de al lado, a los amigos y también es normal encontrar hermanos que no son hermanos, tíos que no son tíos, padres que no son padres, pero todos familia por el simple motivo de que alguien decidió hacerlos parte de su vida.
La familia cubana en ocasiones está dividida por el mar o los sueños, aun así, es una, la familia cubana no se escoge, pero de antemano sabes que nunca te abandonará, estés donde estés, seas lo que seas, pienses igual o no.
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esteban -